Cuestionario: Adriana Schlittler Kausch

¿Cuándo empezaste a escribir y por qué?
Empecé a escribir desde niña. Mi primer “poema” se lo dediqué a un caracol. Fue para un trabajo del colegio. Después vinieron los diarios y, ya en la adolescencia, empecé a publicar en internet (livejournal, blog, fotolog, etc.). Con cierta edad me di cuenta de que en algunos de mis textos se iba perfilando un estilo, así que seleccioné los que más me gustaban y se los mandé a una editorial. De ahí nació mi primer libro.
¿Cuáles dirías que son tus obras y/o autoras/es de
referencia?
Depende de la época y
del momento. Mis clásicos de siempre son Virgilio, Sófocles, Jane Austen,
Alejandra Pizarnik, Charles Simic, María Victoria Atencia, Paul Eluard y
Marguerite Duras. Estos me han acompañado durante toda mi producción a lo largo
de estos años. Pero hay muchos más.
¿Qué es lo que hace decantarte a la hora de escoger
una lectura u otra?
Reconozco que soy una lectora caótica. Voy saltando de un género a otro sin ningún remordimiento. Sin embargo, hay veces que selecciono mis lecturas según lo que estoy escribiendo en ese momento. En ese caso intento ser más metódica.
¿Qué libro no prestarías
nunca por miedo a perderlo?
Lo tengo clarísimo: Alquimia de Tendajón de Charles Simic, editado por la Universidad de México. Es un ensayo poético sobre el arte de Joseph Cornell. Lo encontré por casualidad en una librería hace ya bastantes años.
¿Con qué Adriana te llevas mejor, con
la poeta o con la fotógrafa?
¿Con ninguna de las dos? Ambas me producen frustraciones.
¿Qué libro de los que has escrito hasta ahora
salvarías si te hiciesen un La decisión
de Sophie con ellos?
Uy, creo que la respuesta a esta pregunta también la tengo muy clara, pero prefiero no exponerla para no enfadar a ningún editor, jeje.
¿Cuál es tu momento preferido del día para escribir?
Los fines de semana por la mañana suelen ser muy productivos. Hay gente a la que le encanta escribir de noche, para mí es prácticamente imposible. A raíz de este hecho he notado la importancia de la luz en lo que escribo, lo cual es paradójico, pues en mis poemas hay mucha oscuridad.
¿Tienes algún personaje de ficción al que te
gustaría parecerte?
Villanelle, de la serie Killing Eve. Es una asesina sádica.
¿Una película que nunca te cansarías de ver?
Cualquier película de Zulawski.
Sabemos de tu faceta como escritora y también como fotógrafa, pero resulta que diseñas ropa, actúas… ¿Realmente existe algo que no se te dé bien?
A mí me gusta
muchísimo aprender. Probablemente nada de lo que hago se me dé realmente bien.
A simple vista puede parecer que me disperso, pero lo que yo siento es que mi
necesidad de expresar se traduce en cosas muy diversas. La gente que me conoce
lo sabe, y es por ello que cuenta conmigo para todo tipo de proyectos.
Últimamente invierto gran parte de mi tiempo libre en la observación de aves: el campo y unos prismáticos. No necesito más.


La garganta soporta
los síntomas del alfabeto
Nos pronuncia la sangre
como un gorjeo
inexpresivo
Raíles hacia la fecundidad
estéril
del idioma
Nox Erat, Adriana Schlittler Kausch